Sí, todo era bonito, era como esas
historias de amor de las pelis, esas en las que los protagonistas se quedaban
dormidos después largas horas tumbados uno al lado del otro sin parar de hablar
mientras se acariciaban el pelo. Era exactamente así. Nosotros éramos los
protagonistas y ese era el principio perfecto para una historia de amor. Lo
tenía todo, tardes enteras sin parar quietos, si no estábamos matándonos a
besos, nos estaríamos matando con la mirada. Las noches se hacían cortas sin
parar de hablar, esos días dormir era lo de menos, podía tenerle a 5 centímetros de mi sin ningún tipo de miedo,
tenía la certeza de que no se marcharía, no podría perdonarse perder el lujo de
contemplar cómo me quedaba dormida después de las últimas palabras y caricias
de la noche. No todo sigue igual, pero aún guardo en mi memoria ese principio perfecto de toda peli de amor,
ahora sólo falta ver el final, ese final que tanto se ansía en toda película.
Y espero que el final sea el más correcto! Te sigo!
ResponderEliminarsi esperemos, graciias te sigo yo también.
ResponderEliminar